Wednesday, September 30, 2009

Mi vida depende de ti. . . . . . .




Cuidame Papa. . . . . Cuidame Mama!!!!!!

En accidentes de tránsito, los niños pueden salir despedidos como proyectiles

Por eso, es necesario usar las sillas adecuadas de sujeción para carros, según la edad y peso del menor. En un choque vehicular, el peso se multiplica hasta 12 veces.

“En los niños, la consecuencia principal de este tipo de accidentes es un politrauma severo; es decir, varias lesiones de gravedad en distintas partes del cuerpo. De las cuales, la más importante la sufre el cerebro, con lo que se incrementa el riesgo de mortalidad”, sostiene Olga Lucía Baquero Castañeda, médica pediatra de la Mesa de trabajo de seguridad infantil y prevención de accidentes, de la Sociedad Colombiana de Pediatría.

Según datos aportados por Medicina Legal y estadísticas del Fondo de Prevención Vial, entre enero y diciembre de 2007 se registró la muerte de 827 niños menores de 5 años en accidentes de tránsito.

La especialista añade que algunos menores que no van apropiadamente sentados pueden lograr sobrevivir a este tipo de accidentes. Sin embargo, lo más seguro es que su calidad de vida disminuya, puesto que pueden quedar con discapacidades neurológicas o perder alguno de los miembros de su cuerpo.

Según Baquero, un niño que, por ejemplo, quede cuadripléjico tendrá que afrontar una vida difícil, pues en cualquier situación dependerá de sus allegados; para su familia significará una gran responsabilidad y para la sociedad también tendrá implicaciones, por el uso de los recursos de salud que necesitará.

La causa principal de la mayoría de los accidentes de tránsito es el factor humano. Esto significa que los adultos toman riesgos o decisiones equivocadas que repercuten no solo en su vida y bienestar, sino también en las de los pasajeros y transeúntes, que en muchos casos son niños.

La importancia de prevenir.
A veces, los adultos creen que porque van a recorrer un trayecto corto no vale la pena ajustar los seguros de la silla de sujeción de sus hijos ni el cinturón de seguridad.

En ese sentido, hay que enseñarles a los niños que el uso del cinturón de seguridad no es un castigo, sino una medida de prevención.

También deben aprender cuáles son los riesgos que tienen determinadas actividades y cuáles son las maneras de prevenirlos. Es decir, que si montan en patines, triciclo o bicicleta, deben respetar las señales de tránsito, utilizar casco, coderas y rodilleras y aprender a distinguir y reaccionar ante los sonidos de alarma, como los pitos de los carros, pues, según explica Baquero, “los niños menores de 3 años no tienen todavía el desarrollo suficiente para distinguir el peligro”.

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